Desde que nos enteramos que estamos embarazadas, nuestra vida da un giro de 180 grados. La maternidad nos cambia desde el momento en que sabemos que estamos formando una nueva vida en nuestros vientres. Y durante aproximadamente 40 semanas, nos imaginamos cómo se verá la carita del amor más grande de nuestras vidas. Si esto no es motivo suficiente para una sesión fotográfica, no sabría qué es. La fotografía de embarazos retrata entonces ese momento tan especial en la vida de las mamás justo antes de tener en sus brazos a sus pequeños. Cubrimos eventos familiares como gender reveal (revelación del género/sexo del bebé), baby showers, y sesiones especiales como Fresh 48 (sesión que se hace durante los primeros días en la clínica).
En nuestro estudio contamos con una amplia variedad de vestidos para embarazadas que están a disposición de nuestras clientes.
Cuando nacen los hijos, nacen las nuevas familias, y con ellas nuevas costumbres y tradiciones familiares. Una sesión profesional de fotografía familiar puede convertirse en una nueva tradición para cada nuevo año. Ya sea en nuestro estudio o en exteriores, con bebés, niños pequeños o hijos adolescentes o ya adultos, los retratos familiares son la manera más linda de recordar a todas las personas que las conforman.
Durante estas sesiones podemos incluir no solo a los papis e hijos, sino a los abuelos, tios, primos, padrinos, mascotas y a quien consideres parte de tu familia. Y pueden hacerse fotos de la familia nuclear, o de la familia extensa con la cantidad de personas que tu desees. También cubrimos eventos familiares, aniversarios, cumpleaños, bautizos, etc.
Estas sesiones de fotos son para aquellas familias que consideran a sus mascotas como un miembro más, y los engríen como a un hijo más. Durante estas sesiones retratamos ese vínculo tan lindo y especial que hay entre los miembros de la familia. Se puede hacer con perritos, gatos o cualquiera que sea tu mascota (¡hemos fotografiado chanchitos, caballos, hamsters, conejos y más!). Ya sea en nuestro estudio, alguna locación exterior o en casa de la familia para mayor comodidad. Y se puede también hacer con una o más mascotas, teniendo cada una de ellas, además, un retrato individual además de las fotos familiares.
El único requisito que tenemos para esta sesión de fotos es que no sean mascotas agresivas, y que tengan al menos un entrenamiento básico para que no se escapen. Siempre es bueno que además de la familia, acompañe una persona que pueda ayudarnos a llamar la atención de los animalitos mientras hacemos los retratos. ¡Traerles algo que les encante comer siempre nos puede ayudar!